Hoy comparto este nuevo feedback sobre las tendencias adictivas, puede que te veas reflejado en el relato y, si es así, te recomiendo iniciar Programa Bio COACHING.
Como siempre, agradezco esta generosidad al compartir sus hallazgos, y así puede además fijar sus aprendizajes a nivel consciente.
"En mi última sesión con Paz, trabajamos una de las cosas que más me preocupaban y que no sabía cómo abordar: la relación con mi marido.
El día de la sesión, cuando entré por la puerta Paz me preguntó, como siempre, qué tema quería abordar. Yo llevaba unos días pensando que quería devolver mi proyecto-sentido a mi madre, cuando llegué y se lo comenté, me dijo que tenía más que ver con mi padre que con mi madre, y además ya habíamos trabajado toda la rama materna con bastante profundidad (así fue, porque así lo quiso mi inconsciente).
Así que, al mirar mi árbol (ese día llevaba uno nuevo, mucho más completo), me preguntó que qué pasaba con el padre de mi padre, mi abuelo, que porqué no tenía fechas?? Mi sorpresa fue mayúscula, porque siempre, en todos los árboles que había dibujado para las sesiones, había puesto sus fechas y resulta que justo ese día "se me olvidó"... Claramente mi inconsciente sabía lo que quería trabajar ese día mucho tiempo antes.
Mi abuelo era alcohólico, de cara a la calle no se sabía (en su trabajo era un hombre muy reputado, un banquero) pero lo era. Había sido excluido de la familia, porque ni mis tios ni mi padre habían querido saber nada de él cuando se separó de mi abuela (ni tampoco antes) cuando ellos ya eran mayores.
Lo mejor vino cuando Paz me dijo que la madre de mi abuelo es doble de mi marido y el padre de mi abuelo también lo es, por fecha de defunción. Mi marido es un tío estupendo pero cuando bebe se transforma, yo siempre le digo que parece el Dr. Jekyll y Mr. Hyde, y siempre pensé que tenía algo que ver con mi abuelo, pero nunca encontré la relación, no había "visto" que era doble de mi bisabuela.
La historia dramática es que los padres de mi abuelo eran unos "malos padres" con sus hijos, los trataban mal, los explotaban...y mi abuelo se volvió un adicto al alcohol, bebiendo para rellenar esa falta de amor....en cambio, en el caso de mi marido se trata del polo opuesto, lo contrario: una madre súper protectora y agobiante... y justo se une a mi, y desarrolla este comportamiento!!
Rápidamente comprendí el drama de mi abuelo y tomé consciencia de mi papel en la familia, respecto a la rama paterna. Yo tenía que reparar el drama de mi abuelo alcohólico e incluirle en la familia, por eso me caso con un hombre que tiene este problema.
En la sesión pude reconocer e incluír a mi abuelo en la familia, sentí que era un hombre con una tremenda falta de amor. Durante la terapéutica y sacando mi resentir, la imagen que me venía de él era de tremenda gratitud por entenderle e incluirle, por quererle, aún todavía recordándolo me emociono, yo sólo podía decirle que le quería muchísimo.
Es cierto que me costó mucho sentir la emoción, es más tuve que poner la imagen de mi marido para poder resentirla, pero luego todo fluyó.
En la hipnosis no sólo estaba mi abuelo, estaba también su padre y su madre, apareció mi abuela y mi padre, fue muy emotivo porque, por primera vez vi a mi abuela mirar a mi abuelo con amor, los dos se miraban con amor y respeto, estaban abrazados, los padres de mi abuelo también.
Mi padre aparecía mirando hacia abajo y de repente se agachó y se puso a jugar con su hermano pequeño, el que murió con un año (que era doble de mi bisabuelo, por fecha de nacimiento y por nombre). Comprendí que había sido una gran pérdida para él también, aunque no lo parezca porque él también era pequeño y parecía no acordarse bien de su hermanito.
Apareció mi marido con mi hija (ella también es doble de mis bisabuelos), me encantó ver a mi hija reírse como lo hace ella, con una risa muy enérgica y peculiar, y ver como su padre y ella se miraban con tanto amor. Para mi era una imagen de amor y absoluto entendimiento del "para qué" pasan las cosas... Les mandé amor, les honré y puse a cada uno en su sitio, mi hija ya era mi hija, mi marido también, ya no representaban a ninguno de mis ancestros.
A día de hoy (han pasado quince días) aún me emociono al acordarme y sólo me sale gratitud y amor, sólo puedo agradecer a la vida poder descubrir todo esto y liberar todo el drama familiar.
Como madre, también me siento muy tranquila y agradecida por dejarle a mi hija un camino mucho más libre y feliz, y poder entender y darme cuenta del gran maestro que tengo a mi lado, mi marido, ahora yo no le juzgo...
Todos en la vida tenemos comportamientos que nos "toca" tener, y desterramos y juzgamos a aquellas personas que no son como a nosotros nos gustaría..¡entendámoslas y démosles su lugar y otra oportunidad!! Yo lo he visto muy claro, no tienen culpa...hacen lo mejor que pueden...
¡Gracias Paz, seguiré aprendiendo y nos seguiremos viendo a lo largo de la vida!
