Parece que la ciencia sigue en el camino de darle la razón a la conciencia.
Yo personalmente espero que muy pronto, no solo sean unos pocos los que se beneficien de nuestro trabajo silencioso, sino que sean muchos más los que lleguen hasta esta perspectiva terapéutica.
Sin necesidad de confirmaciones científicas, aquí estamos en la avanzada!
Observamos la noticia publicada ayer, 6 de noviembre (311-55) en referencia a ciertas investigaciones científicas que podrían demostrar que los traumas se pasan de generación en generación dejándo improntas en el ADN de los descendientes....¡como si no lo supieramos ya!
“Si estos resultados se confirmaran, sería una revolución no solo en biología, sino también en política, economía, sociología…”, afirma Roser Nadal, investigadora del Institut de Neurociències y de la facultad de Psicología de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB)"
¿Se supone que hasta que no se confirmen los resultados no habrá un cambio de conciencia global? Mientras tanto, sólo unos pocos estamos habilitando procesos terapéuticos y de transformacion, basándonos en estas premisas, sin importarnos si ya se comprobaron o no...simplemente observando que funcionan...
La solución para traer hijos más sanos al mundo es posibilitarles un Proyecto Sentido Gestacional lo más libre de cargas. A su manera lo confirma Kerry Ressler, investigador de la Escuela Médica de Harvard, en su proyecto con traumas en ratones, aplicando descargas eléctricas asociadas a un olor y observando qué ocurre en la siguiente generación: “Si remedias al miedo de forma eficiente antes de que el animal se reproduzca, ese remedio también se transmite”.
Y tú, vas a esperar hasta que la ciencia lo confirme, o prefieres ponerte en marcha ahora, no necesitas esperar, eso es tan sólo una creencia limitante.
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